Guzmán L.

La evidencia sugiere que el tlacuache habría sido un marsupial de tamaño mediano, con nariz respingada, cola sin pelo y dedos largos. La literatura del Cuaternario hallada en el búnker lo asocia con el robo, la actitud picaresca, el hastío existencial y con un extraño amor por la basura.

Nuestra única opción, por tanto, es avanzar de espaldas a él: movernos ciegamente hacia lo desconocido.

cambio, Tsu sabía que él iba a sobrevivir. La fauna pequeña sobrevive: se adapta, repta por la ciudad y aprende a rapiñar de los humanos. Tsu y los suyos lo han hecho siempre.