María Esperanza Romero

Probablemente aquel era incluso más inteligente que nosotros, porque tenía que almacenar e interpretar en su cabeza miles de informaciones de las cuales dependía su vida, mientras que nosotros, a menudo por aburrimiento, no hacemos más que comprobar en el smartphone el tiempo que hace o jugar a CandyCrush.

Todo lo que es más próximo en tiempo y espacio es más fácil de contemplar y permite conocimientos más exactos. A esto se añade la dificultad de que sabemos menos acerca de la época anterior a nuestro paso al sedentarismo porque no existen testimonios escritos. Los cazadores y recolectores no eran, por lo general, muy dados a la escritura. La idea de la escritura es un invento moderno que aún habían de realizar los miembros de una civilización urbana.

La simplificación es el único camino transitable para contar la historia

Sin embargo, el querer clasificar y establecer vínculos es lo que hace de nosotros seres pensantes. Pensar significa establecer conexiones en el cerebro. Cuanto más ordenados estén los datos y menos aleatorias sean las conexiones entre sí, en la medida en que pueden constituir patrones, más fácil resulta almacenarlos en la mente, transmitirlos a otra persona, anotarlos en un libro.

querer clasificar y establecer vínculos es lo que hace de nosotros seres pensantes. Pensar significa establecer conexiones en el cerebro

necesitamos lo tangible, lo evidente, lo que salta a la vista, lo cautivador, lo romántico. No estamos hechos para lo abstracto.

lo mejor solo nos contamos historias para consolarnos. Porque somos conscientes de nuestra temporalidad o porque con ellas podemos darnos a nosotros mismos la sensación de perdurabilidad.

to, el berlinés Alexander Demant, han sido mi guía. También me he dejado orientar por N

770 en Inglaterra, al igual que el primer telar mecánico, que data de 1786.

pueblos y las gentes, la estupidez y la sabiduría, la guerra y la paz van y vienen como las olas