—Tú vives de lo que yo gano. Con el dinero que yo traigo a casa vas de vacaciones, al salón de belleza, a hacerte la manicura, la pedicura. Tienes un coche caro. Te compras ropa cara. ¿Y ahora pretendes entrometerte en mi trabajo? ¡Idiota de mierda, hija de la gran puta!