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Gueorgui Gospodínov

Física de la tristeza

Partiendo de la figura del Minotauro, Gospodínov construye un laberinto de historias sobre su familia, saltando de una era a otra, de una identidad a otra, para recorrer los meandros de la memoria individual y colectiva de su país y de todo el continente.
El libro agotó su primera edición en un día y se convirtió en el más vendido en Bulgaria en 2012. Finalista de los premios Strega y Gregor von Rezzori, y ganador de prácticamente todo premio posible en su país, Física de la tristeza reafirma el lugar de Gueorgui Gospodínov como uno de los escritores más audaces de la literatura europea contemporánea.
• Novela búlgara del año 2013
• Hristo G. Danov a la mejor novela
• Premio de literatura de la ciudad de Sofía
• Prix Jan Michalski
• Finalista del Premio Gregor von Rezzori
• Finalista del Premio Strega Europeo
• Finalista del PEN Translation Prize
• Finalista del Haus der Kulturen der Welt International Book Prize
• Seleccionado para el 2017 International Dublin Literary Award

«Un gran libro que se muestra ya como la prosa más avanzada del continente y que se desarrolla como un emocionante estudio del mito que acontece siempre y en todas partes». —Olga Tokarczuk
«Gospodínov es uno de los autores europeos más sobresalientes de la actualidad. Hay muy pocas novelas que se le presenten al lector experimentado como absolutamente nuevas. Física de la tristeza es una de estas raras excepciones». —Alberto Manguel
«Gospodínov ha entrado en la primera división de los autores europeos. Se aleja de las tierras de lo comercial y la convención, salvándose no solo a sí mismo, sino a la literatura (¡y, con ella, al mundo!)». —Andreas Breitenstein, Neue Zürcher Zeitung
«Física de la tristeza de Gueorgui Gospodínov combina la experimentación formal con el impacto emocional en una evocadora exploración sobre cómo y por qué los humanos cuentan historias. Gosponídov se adentra en las laberínticas estructuras del cerebro humano, de las ciudades y de los propios libros [y] yuxtapone lo grotesco y lo bello, siendo a la vez concreto y trascendente. Un juego intelectual y una historia demasiado humanas. Física de la tristeza es un libro cautivador». —Elizabeth C. Keto, The Harvard Crimson
«Gospodínov habita en un espacio donde lo trivial nunca puede ser desenredado de lo excepcional, donde pasado y futuro convergen en un presente que solo puede ser narrado desde los fragmentarios ángulos que conforman nuestro ser. Física de la tristeza es un receptáculo de experiencias, recuerdos e imaginación, un compendio laberíntico de historias que abarcan la completa realidad de la Bulgaria del siglo XX, que en cierto sentido, desde sus particularidades propias, es una historia universal». —Andrés Seoane, El Cultural
310 printed pages
Copyright owner
Bookwire
Original publication
2020
Publication year
2020
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Quotes

  • Adal Cortezhas quoted2 days ago
    He aquí lo que he descubierto. Es tan obvio que es casi imposible verlo. El ácido desoxirribonucleico de cada ser viviente, con su doble cadena, tiene la estructura de un laberinto. Un laberinto vertical que se despliega en una espiral. Las instrucciones genéticas para todas las formas de vida están escritas en un laberinto. Así que esa es la forma ideal para conservar y transmitir la información. Por eso el ADN ha permanecido tanto tiempo codificado. Estamos hechos de laberintos.
    A
    CI
    DO
    DE
    SO
    XI
    R
    R
    IB
    O
    NU
    C
    LE
    IC
    O
    Ácido desoxirribonucleico. Desoxirri… El pez oxirrinco nada en el caldo primigenio de esa palabra. La escribo una y otra vez hasta perderme en el laberinto de ese nombre.
    Pero allí hay un error, un bug, un lugar equivocado. Lo que me transforma automáticamente en minotauro. Recorro todo el laberinto de mi propio ácido desoxirribonucleico para dar con ese error. Yo estoy encerrado en uno, el otro está encerrado en mí. El laberinto en el Minotauro.
  • Adal Cortezhas quoted2 days ago
    Los telómeros se acortan y las células mueren cada segundo… La verdad es que la ciencia aún anda en busca del mecanismo del envejecimiento… Las células más importantes, las cerebrales, nunca se regeneran… Soy un cementerio que camina. Tal vez por eso recorro con tanta devoción los cementerios de cada ciudad… Hay cierta armonía en unir la propia muerte segundo tras segundo a la muerte del mundo.
    (66 años)
  • Adal Cortezhas quoted2 days ago
    Aya, de tres años y medio, me retrata con su bolígrafo. Me entrega el dibujo, me vuelve a mirar, se acuerda de algo y rápidamente me retira la hoja de vuelta. Se me olvidó dibujar unas líneas en tu frente, dice.
    Y así envejecemos.
    (42 años)

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