Peter Doggett

Es curioso que los coleccionistas quieran saber cosas de los discos. En aquel entonces, los grabábamos y nos olvidábamos de ellos. Si hubiéramos sabido el interés que despertarían hoy, habríamos prestado más atención»

diácono se convirtió finalmente en Blind Lemon Jefferson, el (literalmente) inimitable padre de una nueva tradición: la del solista de blues. B. B. King hablaba de él de la misma manera que Sterling Brown recordaba a Ma Rainey: como de alguien cuyo quejumbroso lamento expresaba los sentimientos ocultos de todo el que lo oía. «Yo creía en todo lo que él cantaba», recordaba King. «Blind Lemon cantaba para los pecadores»(n199)

Yo estaba enfermo y no me recuperaba», exclamaba en su primera grabación, cuya cara B era una canción titulada «Jesus Make Up My Dying Bed» [«Jesús, prepara mi lecho de muerte»]. En la terrorífica «Dark Was the Night, Cold Was the Ground» [«Oscura era la noche, fría estaba la tierra»], avanzaba tropezando por una oscuridad que solo un hombre ciego podía sentir, trascendiendo la lascivia del blues o la esperanza de una segunda llegada de Cristo con un fantasmal y lobuno aullido de desesperación

La razón de que el crac del 29 haya pasado a la mitología a la vez que a la historia fue lo abrupto de su llegada, justo cuando la comunidad financiera estadounidense presumía de que la nación iba a entrar en una década de prosperidad sin paralelo

Ninguna de las dos historias tenía una base real, como tampoco la tenía el rumor de que el popular pianista americano Charlie Kunz usaba las retransmisiones de la BBC para enviar mensajes

honky-tonk era la banda sonora del cortejo adulto a lo largo y ancho de los estados del sur de Estados Unidos y sus canciones estaban llenas de adulterio, lujuria y alcohol, temas que también se encontraban, en diferentes localizaciones geográficas, en la ranchera de México (

Estaban al borde de la adolescencia y del conocimiento sexual y en Sinatra encontraron... bueno, una figura paterna, según un periodista, o un niño necesitado de una madre, según los psicólogos

Los países comunistas pronto tuvieron sus equivalentes: en Rusia estaban los stiliagi, o «estilosos»; en Hungría, los jampacek, o «muchachos», y en Polonia, los bikiniarze, que tomaban su nombre del atolón Bikini

batería antillano Edgar Manning tocaba en una banda de jazz del West End y vendía drogas (de nuevo marihuana, aunque la cocaína estaba también al alcance de cualquiera

No es un secreto que algunos de los mejores estallidos de sincopación, al igual que algunos de los mejores productos de los poetas simbolistas, debían buena parte de su expresividad al uso de una droga