Con el tiempo, formularon su trabajo en torno a una serie de ejercicios en tres disciplinas fundamentales:
La disciplina de la percepción (cómo vemos y percibimos el mundo que nos rodea).
La disciplina de la acción (las decisiones y acciones que tomamos y con qué fin).
La disciplina de la voluntad (cómo hacer frente a las cosas que no podemos cambiar, cómo desarrollar una opinión clara y convincente, cómo entender realmente nuestro lugar en el mundo).