Si no estás dispuesto a pelearme, no te quedes
Si no tienes tiempo ni ganas,
Si estás cansado de escucharme, de consolarme, de prometerme
Si no quieres hablar, ni acompañarme
Si no puedes tomarme de la mano, o abrazarme
Si te parecen demasiados mi angustia, mis lamentos
Si no estás interesado en derribar mis muros
En conquistar de nuevo lo que perdiste en el tiempo
Si todo mi llanto te ahoga y mi soledad te agobia
Por favor, amor mío,
Aunque me muera, no te quedes.