1. CONTABILIDAD. Lo que yo llamo educación financiera. Es una habilidad vital si usted quiere construir un imperio. Mientras más dinero tenga usted bajo su responsabilidad, mayor precisión se requiere, o la casa se desplomará. Éste es el lado izquierdo del cerebro, o los detalles. La educación financiera es la capacidad para leer y comprender estados financieros. Esta capacidad le permitirá identificar las fortalezas y debilidades de cualquier negocio.
2. INVERSIÓN. Lo que yo llamo la ciencia de hacer que el dinero produzca dinero. Esto incluye estrategias y fórmulas. Éste es el lado derecho del cerebro o el lado creativo.
3. COMPRENSIÓN DE LOS MERCADOS. La ciencia de la oferta y la demanda. No es necesario conocer los aspectos "técnicos" del mercado, que son impulsados por las emociones. El muñeco de Tickle Me Elmo, que se vendió en la navidad de 1996, es un ejemplo de un mercado técnico o impulsado por las emociones. El otro factor del mercado es el "fundamental", o el sentido económico de la inversión. ¿Tiene sentido una inversión, a la luz de las condiciones actuales del mercado?
La mayoría de las personas piensa que los conceptos de inversión y comprensión del mercado son demasiado complejos para los niños. No comprenden que los niños conocen esos temas de manera intuitiva. Para aquellos que no conocen el muñeco de Elmo, se trataba de un personaje de Plaza Sésamo que fue presentado constantemente ante los niños justo antes de navidad. La mayoría de los niños quería uno y lo puso a la cabeza en la lista de compras de navidad. Muchos padres se preguntaban si la compañía fabricante había mantenido el producto fuera del mercado intencionalmente, mientras seguía anunciándolo para navidad. Se desató el pánico debido a la alta demanda y la falta de oferta. Como no había muñecos que comprar en las tiendas, los especuladores vieron una oportunidad para hacer una pequeña fortuna a costa de los padres desesperados. Los padres desafortunados que no encontraron un muñeco se vieron obligados a comprar otro juguete para navidad. La increíble popularidad del muñeco de Tickle Me Elmo no tenía sentido para mí, pero sirve como un excelente ejemplo de la ley económica de la oferta y la demanda. Lo mismo ocurre con los mercados de acciones, obligaciones, bienes raíces y tarjetas de béisbol.