Deb Strickland estaba ya bastante ocupada dirigiendo su pequeña revista semanal como para relacionarse con Jimmy Mission. El atractivo ranchero había regresado para instalarse en el pueblo, y eso no entraba para nada en los planes de Deb. Pero ante el mortal encanto de Jimmy, se sentía tentada a mantener un tórrido romance con él mientras durara…
Jimmy estaba buscando una esposa… de verdad. Solo que no podía dejar de pensar en cierta sofisticada chica llamada Deb Strickland. Sospechaba que Deb no se adaptaría demasiado bien a la vida de un rancho… ¡pero apostaría cualquier cosa a que se desenvolvería increíblemente bien en la cama! Por eso le hizo una propuesta que ella no pudo rechazar. Una propuesta absolutamente desvergonzada….