Nada más

Hay papeles que he de guardar a la sombra de mi inteligencia.

Lo que hago es indeleble.

Estas dos frases abren por sí solas el mundo entero: los objetos, los vientos, los gritos de los niños, el sol que muere mientras se profieren esos gritos.

Que el mundo camine hacia su perdición.

Vanidad de vanidades.

Todo es vanidad e ir en pos del aire.

Soy la escritora salvaje e inesperada.

Al rato, la misma tarde

Vanidad de vanidades.

Todo es vanidad e ir en pos del aire.

Estas dos frases dan para escribir toda la literatura de la tierra.

Vanidad de vanidades, sí

Usted le amaba.
Mucho más que eso.
La belleza de sus manos,
eso es, sí.

Nada. Excepto los vivos, que sonríen, que recuerdan.

Y, después de la muerte, ¿qué queda?

L’Homme atlantique (1982

Recuerdas lo hermosos que fuimos. Después nadie lo ha sido tanto.

El odio sirve para resistir.

¿Le has pedido a Dios que me mate?