Para una amante de los gatos como yo, este pequeño poemario es como un buen café en una tarde fría, justo lo que necesitaba. Es sencillo, divertido y precioso. Cada poema es la historia de un gato en particular, excepto por alguno que habla de los gatos en general, pero me encantó lo narrativo de cada uno, el estilo del autor... Que cosa bonita!! Espero poder conseguirlo en físico algún día.