Thoreau dijo que cuando la conversación crecía, se llevaba a sus huéspedes a la naturaleza. Esta imagen me lleva a pensar también en una «cuarta silla», para las conversaciones que Thoreau no podría haber previsto. Contemplo cómo hemos creado una «segunda naturaleza», una naturaleza artificial, y tratamos de entablar diálogo con ella. Hemos creado máquinas que hablan16 y, al hablar con ellas, no podemos evitar atribuir una naturaleza humana a objetos que no la tienen.